21 abril 2017

Tan bonitos



Fui la lluvia cayendo sobre ti 
que eras el firme pavimento.
Si hubiese encontrado las palabras exactas 
en el momento correcto
entenderías ahora 
porque miro al vacío en vez de a tus ojos
y entenderías ahora 
porque agacho la cabeza 
como un perro asustado que ha metido 
el rabo entre las piernas.

Me ahoga la pena de ver en qué nos hemos convertido.
Nosotros, que fuimos tan bonitos.

Y sigue pasando el tiempo
y siempre espero ser más fuerte la próxima vez
siempre tengo la incomprensible esperanza
de que algún día sabremos arreglarlo.

Que volverás a reírte conmigo,
de mis locuras, de las cosas que te digo
que volverás a confesarme que llevas el mundo
colgando de un hilo.

Que sigues queriendo recuperar nuestro nido
aunque sean otras manos más suaves que las mías
las que te proporcionen alivio.
Aunque nos baste con hablar del mundo, pasear y reírnos.

Saltar sin mirar, al otro lado del abismo.
Encontrar un rayo de luz que reste un poco de oscuridad
a esta pena de ver en qué nos hemos convertido.

Nosotros, que fuimos tan bonitos.







12 abril 2017

Me prometo


Me prometo 

no enfrentar mi corazón nunca más
a unos ojos que no quieran verlo.

Escuchar con más atención a la evidencia
que me habla desde dentro.

Me prometo

conservar impecable el recuerdo
dar las gracias por lo aprendido
mirar con detenimiento la próxima vez
el suelo que piso.

Me prometo 

sonrisas, abrazos y vuelos
los dedos cálidos que taparan mis agujeros.

Me prometo

no albergar sentimientos feos
dar pasitos hacía delante
aunque sean muy pequeños.

Me prometo arder aunque apaguen el fuego
me prometo fluir aunque el cauce esté seco.

Me prometo no volver a decorar un sentimiento
decir solamente la verdad a quien sé que está mintiendo.

Me prometo 
aprender a a distinguir el amor propio del ajeno
no volver a romper este silencio que me está creciendo dentro.

Me prometo 
no volver a aceptar el miedo como parte de nosotros,
que ese hueco lo ocupen las ganas. Será eso o no seremos nada.

Me prometo
no conformarme nunca más con las migajas,
será de verdad, o no seremos nada.










05 abril 2017

Algo más




A veces, solo a veces, me siento como si el viento soplara con fuerza, y yo que camino
a la contra, tuviese que agarrarme a un árbol o a una farola para que no me arrastre.

Está siendo duro.
Me está costando mucho.

Y en medio de este vendaval, tú que ya no estás, sigues teniendo la capacidad de
arrancarme cosas.

Hoy te llevas algo más.
Algo maravilloso que encontré al azar, con lo difícil que es encontrar algo así
en un lugar como este.

Espero que sepas algún día encontrar la dulzura para tratarla de la forma en que ella
te trata a ti.

Espero que no alces la voz o que no la menosprecies de la misma manera en que
nos has menospreciado a todos los que osamos acercarnos.

Está siendo duro.
Porque todas las personas que me daban calor se están deshaciendo como si fueran
de arena.

Porque ya no confió en el lugar que ocupo en este sitio.
Porque ya no creo en lo que hago y los que no se van me han decepcionado.
Porque estoy rodeada de miedo y de tristeza.

Y tú no has tenido nada que pueda agradecer, ni calidez para quienes te han disculpado,
ni la delicadeza de un café con alguien a quien posiblemente no volverás a ver,
ni tiempo para agradecer lo que se te ha dado ni una mínima muestra de seguir 
siendo humano.

Has sido egoísta una vez más. 

Y hay gente que aún puede disculparte, gente bonita nacida para cuidar,
gente que aún no te conoce suficiente.

Gente que todavía cree que yo soy la fuerte.

Es lo último que te llevas.
Un alma bonita que sabe poner a los pozos, escaleras.
Espero que no lo pisotees como hiciste con todo lo demás
y que contribuyas a que no se vuelva oscura,
que valores la luz con la que a veces te alumbra
que no se transforme en alguien dolido y resentido, 
desconfiado y frío, que no destroces su magia
como hiciste conmigo.









01 abril 2017

Eras lo que eras, aunque yo no lo viera



Siempre me pregunté por qué los demás veían tu oscuridad
y yo no podía verla.

¿Por qué parecía que yo veía a una persona distinta?

Las respuestas llegan, tarde o temprano,
pero me llegaron tarde, cuando ya me había ensuciado las manos.
Eras lo que eras, y yo te había inventado.

Yo te di la luz que disipo las sombras,
puse contenido a tus vacíos y alimenté tus sobras.

Colgué adornos en tus púas
y creí la historia que me contaba sola.

El resto, desde fuera, tenían mejor perspectiva
mientras yo cosía y cosía la red, para la inevitable caída.

Eras la evidencia que veían,
y yo paseaba tranquila con mi venda 
por el filo de tus aristas.

Eras lo que eras y yo en el fondo lo sabía.

Me obligaste a reconocer que estaban en lo cierto,
que las mariposas no aguantan vivas 
en el interior de tu cuerpo
porque necesitan aire para volar 
y no hay de eso en tus infiernos.

Que romperías los huesos de las manos 
que te acariciaron
que harías profundos agujeros en los ojos 
que con más amor te miraron,
que sembrarías odio y rabia en alguien 
que nunca supo a que sabían esas cosas.

Eras lo que eras
y tuve que arrepentirme
construir una piel nueva
impermeable y resistente
llenarme de lastre para 
que no me arrastre la corriente.

Aprieto con fuerza los puños
y cuento los segundos,
del uno al diez lentamente
para evitar el fin del mundo.

Me han crecido monstruos
mucho más grandes que los tuyos.
Estoy batallando tanto que ahora son gritos
lo que fueron susurros.


Un minuto frente a ti y ya no estabas,
lo que queda es otro que no se te parece en nada.

Hoy al mirarte he comprendido
que usé tu presencia pero inventé el contenido.

Puse cosas allí donde solo había vacío
y yo lo que de verdad amaba 
eran las cualidades que te inventaba.