¿Cómo llevar arrastras un piedra gigante
y que el peso lo soporten unas alas tan pequeñas ?
Superfluas palabras,
cualesquiera que diga, no reparan nada.
Salen rotas y cansadas,
caen sobre el papel en forma de cascada.
Por eso lo hago, aquí donde caen, no manchan.
Porque escribir es vivir en una habitación cerrada
y dibujar en las paredes, las ventanas.
La tarea más difícil es acallar las voces,
silenciar el rumor constante
anudar el dolor a las letras y transformarlo en una frase.
Construir un rincón protegido
donde no pase nadie
que pise lo verde o ensucie el aire.
Elegir de pareja una palabra
y comenzar el baile.
Escribir para hacer el camino
transitable
y dejar en el blanco pequeños detalles
que sean verdad a tus ojos
y para el resto, indescifrable.
Escribo
para que el tiempo no me arrastre lo vivido
para no ser efímeros y temporales
los mortales escribimos.
Para saber encontrar el camino de ida
sin extraviarse
y llenar el dolor de limpio aire
soñar con llegar un paso más
donde no ha llegado nadie
y poder arrastrar con la fuerza suficiente
esa piedra tan grande.
y llenar el dolor de limpio aire
soñar con llegar un paso más
donde no ha llegado nadie
y poder arrastrar con la fuerza suficiente
esa piedra tan grande.