En las arrugas de mi cuerpo ya no caben más recuerdos,
me hago viejo y acumulo desperfectos.
Las cosas que tanto deseaba, ahora me dan miedo.
He aprendido a conformarme con lo que la vida quiera darme.
Ya no quiero pelear ni conmigo ni por mí, he recogido mis cosas,
cansado de verlas desperdigadas por el suelo.
Los años pasan rápido, creeme.
Llega un momento en que ya no puedo
recordar una primera vez.
He pensado en las veces que he corrido hacía ninguna parte,
en las veces que creí que era imposible cansarme.
He recordado también mi absurda forma de caer
en todos los abismos que encontraban mis pies.
Tengo goteras en el techo, y las paredes sin pintar,
mi casa esta tan desordenada que no puedo encontrarme.
¿Cómo saber cuando ya es tarde?
¿En qué momento soltar el lastre?
No consigo recordar cómo eran las llamas,
¿qué impulso inspirador me despertaba cada mañana?
No logro reírme a carcajadas.
En las arrugas de mi cuerpo está lloviendo,
y he venido sin paraguas.