Quisiera
poder ser el aire,
traspasar
tu presencia y tus palabras
para que
no signifiquen nada.
Desaparecer
del envase que me contiene,
ese
envase transparente que deja ver
las
cosas que me duelen.
Quisiera
ser fuerte,
cuando
tu dura presencia,
se me
sitúa enfrente,
cuando
mi fortaleza es ensayada
y algo
en mi interior no soporta
que
ahora seas alguien diferente.
Quisiera
que el recuerdo no doliera
que no
impregnaras el alrededor
de
ceniza y de tiniebla.
Quisiera
ser otra persona
una
desconocida cualquiera
a la que
no le hicieran mella
tus
desprecios ni tus maneras.
Volver
de vuelta por el mismo camino,
desaprendiendo
lo aprendido.
Me has
quitado algo importante,
la
capacidad de equivocarme.
Las
ganas de volar y la textura del aire.
Lo que
tu te llevaste,
ya no
podrá tenerlo nadie.
Ojalá
pudiera ser nadie.
Me voy
apartando despacio
de ti,
de tu existir y de tu espacio,
de los
recuerdos que manejo
como
sustancias inflamables.
Y ya no
puedo perdonarme
por no
tener el valor de recuperar
las
cosas que me arrancaste.