12 octubre 2016

En nombre del deseo



Perdóname por haber hecho tantas tonterías
me volvieron loca tus ojos y tu sonrisa,
perdí la noción del tiempo y del espacio
y comencé a compararlo todo con el tacto de tus manos.

Perdona la irracionalidad y el desequilibrio,
la confusión y el colapso que me guiaron desde el principio.

Lo siento.
Por no haber sabido darte argumentos sólidos 
y por la inestabilidad de mis precipicios.

Perdóname por haber escuchado solo a mi piel,
ella que me decía justo lo que quería oír,
que te buscara y me derramara sobre ti.

Lo siento,
me volvieron loca tus recovecos,
los instantes preciosos 
navegando sobre tu cuerpo.

Perdóname por haber hecho tantas tonterías
todas las locuras se me olvidaban con tus caricias
con tu boca oscura frente a la mía.

Lo siento.
Cuántas cosas rotas
en nombre del deseo.