27 marzo 2016

Un pez fuera del agua


Hay días que son especialmente amargos
porque todo es ácido a tu alrededor.

Porque te das cuenta de que ese no es tu lugar
pero pasas allí más horas que en ningún otro.

Porque los demás te parecen una masa impersonal
de animales salvajes que solo saben trepar.

Porque has escuchado más estupideces en una hora
de las que en una vida podrías tragar.

Porque se te han mezclado las cartas
y se ha filtrado lo emocional.

Días en que eres un pez fuera del agua
y los otros son el mar.

Porque tú sigues creyendo que mentir está mal
que ser hipócrita está mal
que lo que importa es el contenido,
que debería ganar la honestidad.

Y te miran como el que observa un objeto extraño
con una mezcla de compasión y de sarcasmo,
piensas que están equivocados
pero ellos son mayoría
y tú, solo un pez fuera del agua
intentando respirar a bocanadas.

Sacudiéndose en el suelo torpemente
porque ya no puede respirar.