En un gesto sutil, apagas la luz
y yo me quedo con las ganas de dibujarte un arco iris
con la lluvia de mis ojos.
Recoges lentamente
de manera que descubro
que falta algo cada día
y cuento las horas que quedan
para que por fin me lo digas.
Como si hiciera falta
como si no me faltaran trozos
como si el mundo siguiera dando vueltas
como si no me dejaran marca
en forma de pellizcos, tus ausencias.
Apagas la luz y aún tengo
mil cosas que contarte
me quedan mil caricias para darte
mis ventanas de par en par
a las que no has querido asomarte.
Apagas la luz
y a oscuras tropiezo con todo
las manos mojadas
el aire de plomo
y el mundo sigue girando
como si no me faltaran trozos.
y el mundo sigue girando
como si no me faltaran trozos.