en el que cuando algo lo mueve,
todo se desordena.
Esas frases digiero acompañadas con la pena.
No quisiera ser la nieve que se mueve
en tu bola de cristal.
No quiero ser un objeto allí dentro
ni estar fuera como alguien
que estropea y desordena.
Todo el mundo las agita cuando las ve.
Porque son más bonitas en movimiento.
Luego cuando la nieve se para,
todo vuelve a estarse quieto.
Nunca me gustaron.
Cuando era pequeña me regalaron una.
La observe y pasado un rato concluí que las cosas estaban encerradas ahí dentro.
Sin posibilidad de añadir nada, ni de liberar nada.
Intenté romperla de mil formas distintas, finalmente lo conseguí lanzándola por la ventana.
¿ Te has dado cuenta que la única utilidad de
esas jodidas bolas es moverlas?
Tengo metáforas mejores...
Pero lo importante es que te entiendo.
Desde aquí se ve tu esfera,
vacía, aséptica y quieta.
Tu esfuerzo funciona.
Tu esfuerzo funciona.
Nada ya puede moverla.