Créeme cuando te digo
que he
buscado la manera
de
hallar el equilibrio
y no
saltarme tus barreras.
He
cambiado tanto
mi
disfraz y mi careta
para
poder encontrar
al
llegar, la puerta abierta.
Me
aprendí de memoria
la
contraseña.
"Pasar
liviana por tu lado
y
dejarlo todo fuera"
esta vez
seré sincera
mis
músculos se tensan,
las
piernas me tiemblan.
Yo
quería ser la hoja
y que el
viento me moviera
tener la
esperanza intacta
y
batallar por mis quimeras.
¿Qué
sentido tiene pedir
que no
te quieran?
¿Qué
sentido tiene
pelear
por que lo hagan?
Yo
quería ser la magia
y ahora
soy cualquiera
la que
te baila el agua
apoyada
en la encimera.
Me quito
los zapatos
para no
ensuciar tu alfombra
y
escondo lo que siento
por si
la esencia te estorba.
Finjo
ser fuerte, mientras
me
invade la zozobra.
Me trago
las ganas
porque
sé que están de sobra.
Créeme
cuando te diga
que este
intento es uno más
y aquí
la vida es menos vida.