No te preocupes
solo nosotros sabremos
hacer bien esto.
Quise escuchar tu verdad
y me guardé mis secretos.
No te preocupes
se nos escapa a la razón
por qué las cosas ocurren.
Pero suceden
de todos modos.
Esta montaña rusa
nos está dejando rotos.
Prefiero no ver nada
a ver solo los despojos.
No te preocupes,
creo en nosotros
somos el mapa del tesoro.
Caminaremos
y ocultaremos
los destrozos.
Te dejo aquí
en la bifurcación que nos ha salido
con el cuerpo me quedo quieta
y con el alma te acaricio.
Ya hemos tenido suficiente sinsentido
tu lado invadido junto al mío
y mi cariño vertiendo el contenido.
Espacios y distancias que por fin
hemos tenido el valor de convertir en palabras.
No te preocupes.
Ya no puede herirnos nada.
He utilizado la claridad para preguntar ¿ que te pasa ?
y por fin has respondido.
Así era de sencillo.
Te he pedido que descanses
y yo haré lo mismo.
Nada merece tanto empeño
tanto miedo
tanto abismo.
A cada segundo precioso le sigue un cataclismo
la invasión, el movimiento, las dudas y el desconcierto.
Todos ellos alimentados por el miedo.
Ha crecido tanto que ha llegado hasta mí.
Y no quiero ser la pata que cojea.
No quiero romper ese equilibrio que tanto te cuesta mantener.
No te preocupes.
Era inevitable.
Demasiada intensidad
y demasiado tarde.