30 noviembre 2015
Soy
Soy la flor que ya no riegas
la marchita presencia que decora tu encimera.
Soy la voz que ya no escuchas
haciendo eco entre otras muchas.
Soy la puerta abierta que golpea con el viento
contando los días y quedándose sin dedos.
Soy el enredo de tu pelo
pasándome las manos arrastro tu recuerdo.
Soy el agua que ya no te moja
resbalando gota a gota por tu raíz y por tus hojas.
Soy las palabras que se han quedado dentro
a falta de aire que las haga vibrar.
Soy la botella vacía que recogiste al naufragar.
Soy la humedad que se filtra por tus grietas
el placer con que alimentas la humanidad que te queda.
Soy la fiera domesticada y eso ya no te interesa.
Soy el cuerpo que habitabas
cuando el deseo traspasaba
las pesadas capas que tu cuerpo soportaba.
Soy el hueco en el que encajan
todas tus tormentas.
La pared que golpeas cuando llega la tristeza.
Soy la zona confortable
que aún resiste tu desastre.